En Veracruz, hay adultos mayores que podrían ser discriminados, llegando a extremos como el maltrato en sus diferentes formas, inclusive, la violencia. La Geriatra de la Unidad Médica de Alta Especialidad Hospital de Especialidades No. 14 del Centro Médico Nacional (CMN) “Adolfo Ruiz Cortines”, Nubia Franco Álvarez invitó a la población a practicar la cero discriminación al adulto mayor.

“Se ha identificado un estigma y cierto grado de discriminación hacia las personas adultas mayores, es por ello que el Seguro Social busca promover prácticas que desarrollen el respeto a su dignidad y erradicar cualquier tipo de maltrato o violencia a sus derechos humanos”.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), cuando la edad se utiliza para categorizar y señalar a las personas provocando daños, desventajas e injusticias, se conoce como “edadismo”; el resultado son estereotipos, (cómo pensamos), prejuicios (cómo nos sentimos) y la discriminación (cómo actuamos), hacia las personas de acuerdo con su edad.

Asimismo, especificó que, en el caso de las personas adultas mayores, se clasifica como “viejismo”, mismo que empobrece su salud mental y reduce su calidad de vida, por lo que, es muy importante evitar el uso de expresiones que puedan afectarlos emocionalmente, tales como: abuelito, abuelita, decrépito, ruco, vejete, senil, lento/a, achacoso/a, viejito/a.

“Este tipo de expresiones se asocia a una muerte cercana y están relacionadas con disminución de la salud; esto puede desatar la aparición de trastornos mentales como depresión y ansiedad, o desencadenar comportamientos de riesgo, así como aislamiento social en el individuo; en la familia aumenta la probabilidad de maltrato o violencia, ya sea de tipo financiero, psicológico, físico, sexual e incluso el abandono o la negligencia”, enfatizó la especialista.

Finalmente, Franco Álvarez puntualizó que el Seguro Social cuenta con la estrategia “8 Prácticas de cero-discriminación a las personas adultas mayores”, las cuales contribuyen a respetar, proteger y cumplir el derecho humano de la protección a la salud en esta población, proporcionando un trato adecuado que dignifique la vejez, aprovechando sus conocimientos y experiencias para enriquecer a la sociedad en general.