La efeméride del 5 de Mayo de ese lejano 1862, cuando tropas al mando del general Ignacio Zaragoza combatieron en Puebla a las tropas de Francia –mientras la mayoría de  Poblanos no les daban ni agua a los nacionales, enojados porque, caray, se soñaban mejor bajo el Imperio de Maximiliano-; es fiesta mayor, qué cosas, hoy en Estados Unidos, más que aquí en nuestro territorio…

El dato cierto no es menor: aquí no pasa, y en varios estados más de la república, en ser mero ejercicio de nostalgias guerreras por las invasiones de antaño, rememorados en desfiles deslucidos y en ceremonias de la oficialidad actual gobiernista, sumergida en los escándalos del Presidente: “¿y qué tiene?” dijo Andrés Manuel López Obrador, reconociendo los contratos de la red de amigos de “Andy” López Beltrán, su hijo, y revelados por el periodista Carlos Loret de Mola: “intercambiemos propiedades…” dijo AMLO, pero no desmintió ni uno sólo de los contratos exhibidos: “hagan la cuenta, no es nada…” remató.

¿No son nada 100 millones de pesos de contratos directos?

A eso se redujo ya la respuesta del Presidente de México: olvidado AMLO de sus muchas promesas durante 16 años de campaña permanente, pero la principal: que se acabarían, con él, los privilegios y abusos del Poder en turno: nada decía, quedaría en su gobierno del influyentismo, el nepotismo, la corrupción: ayer dijo “no es nada…”  

En este Contexto arribamos hoy en México, a la efeméride conocida como “la batalla de Puebla” y la verdad para millones, hoy, dadas las circunstancias, esta significa menos que nada…

Porque hay otras batallas actuales que afrontar, en medio de un bombardeo constante, diario, de descalificaciones, omisiones y amenazas desde una conferencia “mañanera” de un Presidente que desperdició así el bono social del Voto Popular y despilfarró su “voto parejo” para comvertir a las mayorías de MORENA con honrosas excepciones, en unos viles levanta dedos que han pisoteado todas y cada una, de las promesas hechas a la ciudadanía que exigía sanear la Vida Pública nacional…

Desplomadas sus promesas principales: acabar, “en 6 meses…” prometía AMLO, el flagelo del Narco, y a cambio “porque se vale cambiar de opinión”, justificó, le dio más poder a las Fuerzas Armadas entregándoles puertos, aeropuertos, aduanas, el “Tren maya”, y un sinfín de negocios y empresas más entre las que se cuentan hoteles.

Hoy, en México, la mayoría del “voto consciente” que obtuvo AMLO en 2018 está desencantada, decepcionada, enardecida e indignada con sobradas razones: porque lo impensable pasó: y ha tenido que salir a marchar para defender al árbitro electoral y en un futuro inmediato tendrá que hacerlo por el INAI: uno de los reductos que el presidente ha dicho “no sirve para nada…” pero que se valió de él, como de otros organismos autónomos, para afrontar, en su etapa de opositor, todo lo que millones en México luchábamos por erradicar.

Enfrascados en batallas civiles impensadas, miles de mexicanos además, ven con preocupación los signos oscuros de alianzas criminales con un gobierno al que se le dio el voto de la confianza que utilizan como “carta blanca” para justificarse, ahora, a la luz de cientos de señalamientos no aclarados: la carta “de los Chapitos” prende alarmas en los más enterados. Y pone notas ominosas en quienes creen que México se puede “descomponer” mucho más de lo que reflejan, en estas horas, Tamaulipas, Sinaloa, Guerrero y Michoacán.

Aquí en Veracruz las cosas van a peor: la creciente violencia que cobra la vida de Mujeres, por las más diversas razones que esgrimen los agresores Feminicidas, y para la cual no hay política de contención y menos de prevención: se cuestiona por tanto la utilidad del propio Instituto Veracruzano de las Mujeres, cuya titular es menos que cero a izquierda en su calidad de “encargada”, muda y silenciosa, porque Cuitláhuac de MORENA igual que en su momento Miguel Ángel Yunes del PAN en su Bienio, nunca les dieron ni les darán, calidad de titulares con representación legal en el organismo supuestamente “autónomo”…

Y en la ciudad de Veracruz, donde su alcaldesa Patricia Lobeira, del PAN, celebra que una encuesta aplicada a 1 mil 500 ciudadanos, la coloca como “la mejor” a nivel nacional; no se detiene a calibrar el humor de los jarochos por los asaltos y robos a Casas a plena luz del día, como el que ocurrió ayer en una casa ¡habitada!, en la calle de Altamirano entre 1º de Mayo y Gómez Farías, y cuyos propietarios encontraron a los ladrones alrededor de la 1.30 de la tarde, con  las cámaras de video vigilancia violentadas y los asaltantes en su faena…

Los ahuyentaron con ayuda vecinal y policial y procedieron a ocuparse del trabajoso Calvario que significa ir a denunciar en una Fiscalía un delito en calidad de agraviado: terminaron a las 9 de la noche poco más, para regresar a su domicilio y encontrarse con que ¡los mismos desgraciados estaban terminando de saquear su casa! El colmo: y atraparon, con ayuda de los Vecinos Vigilantes, a uno de ellos, y el tipo resultó que tiene un largo historial de robos y asaltos: vive en la zona de Carlos Cruz y Juan Soto, y admitió que a eso se dedica y exhibe dos heridas de bala en el abdomen: producto de su oficio.

¿Qué tal esto, diputados federales y de todos los Congresos por medio México levanta dedos de todos los partidos MORENA, PAN, MOVIMIENTO CIUDADANO, PRD, PRI, VERDE, PT cuándo dejarán sus agendas convenencieras partidistas y personales, para atender el desastre que son las actuales leyes en materia de “delitos menores” que afectan el día a día de los Ciudadanos…?

Así México, así Veracruz por nuestros días…para muchos, una batalla prolongada cuyo desenlace no se vislumbra ni pronto ni bueno…

Nos leemos, si Dios permite, el próximo lunes, disfruten este “feriado” en familia, amores y amigos, los únicos refugios cuando son sólidos, buenos y ellos sí: moralmente intachables…