** Desde ayer aquí, no hay más que especulación en redes sociales desde el inusual tuit del Presidente Andrés Manuel López Obrador, ese que empezaba: “Ni modo, amigas y amigos: salí positivo a COVID-19. No es grave. Mi corazón está al 100 y…”
** Y nada: que para miles de seguidores de la cuenta twittera de AMLO, surgió el “chirrido” ante ese anuncio, por la sencilla razón de que, así, no suele “tuitear” el presidente. Y que desde el sur del país la primera versión propalada desde medios locales, es que López Obrador se desvaneció delante de empresarios y gente de FONATUR y fue trasladado de emergencia, vía área, a la capital del país.
** Y que había sido trasladado al Hospital Militar de la capital, ingresado y estabilizado en terapia intensiva.
** Ayer, las versiones sobre la salud del Presidente de México, estuvieron propaladas por las redes sociales y sostenidas en la mera suposición, en dudosas “confirmaciones” de fuentes no identificadas, de varios tuiteros, después del tuit de un vocero como Jesús Ramírez quien se vio lento, débil y poco creíble, como corresponde a quien no es realmente periodista y no tiene noción ni directriz sobre el manejo de la información oficial y de Estado.
** Lamentable claro, que muchos en las redes se hallan volcado a verter toda clase de supuestos de la situación “en caso de…” y malos deseos para el presidente.
** Nadie en México, con esenciales Valores y suficiente información de las repercusiones políticas y los escenarios indeseables, desea para el Presidente AMLO un desenlace fatal: y aquí sobran las malas consideraciones de toda índole.
** Como a cualquier ser humano, por mucho que se vea como “adversario”, o peor, como “enemigo”, no se le debe desear el mal. Todo lo contrario. Y en las actuales circunstancias de nuestro México, la desaparición abrupta del presidente crearía una desestabilización terrible.
** De hecho su ausencia hoy, en “la mañanera”, ya es motivo para amplios sectores sociales, de desestabilización y angustia: una que al país y a nadie conviene.
** Al presidente se le desea muy pronta recuperación. Que salga de inmediato de su crisis de salud que, según médicos que usan las redes sociales, si sufrió un desmayo y una reinfección, la tercera, de Covid-19, lo consideran muy grave: por las complicaciones con otras dolencias que probablemente padece.
** La oposición política en México que quedó pasmada desde ayer, debiera ocuparse en estas horas, no en la espera inactiva o en la especulación, sino en la reflexión sobre todos los escenarios: en lo que no deben descartar que la recuperación del Presidente pase por secuelas graves o imposibilitantes. Y hay que prever todas y cualquier, condición en estas horas realmente inciertas.
** Pacífico lunes a todos.
DEL DICCIONARIO A LA DIABLA…
DESEOS.-En Política y en la Vida, los malos, siempre tienen su correspondencia en la vieja sentencia Bíblica: “70 veces 7…”
IMPREVISTOS.-En una Nación que presuma de Democrática, no deben ser motivo de debilitamiento ni de exposición.
NORMALIDAD DEMOCRÁTICA.-Una aspiración “por el bien de todos…”