Terminamos marzo del 2023 como en una exhalación que no tiene nada de liberadora: acaso sólo para aspirar y contener de nuevo la respiración, sumergidos en el remolino de acontecimientos catastróficos en México: el video donde se queman 39 migrantes encerrados bajo llave, en una “estación migratoria” de Ciudad Juárez, da cuenta real de la transformación de pesadilla que es, por momentos y cada día, mucho de la vida mexicana…
Es una primavera ardiente ésta de 2023: con la sombra del “plan C” resumido en esta semana, en la designación por una “tómbola” movida por la mano y el empecinamiento de AMLO, para que una mujer, Morenista claro, y con varios familiares en la nómina gubernamental, presida el INE. ¿Fin de las luchas sociales callejeras para proteger al árbitro electoral? Ya se verá. Hay una especie de letargo pre Semana Santa que no tiene nada de recogimiento ni de Paz espiritual.
En tanto, el luto tardío y el dolor fingido es eso: si nos atenemos a la risa del presidente esa misma mañana en que, dicho por el tabasqueño Adán Augusto, ya sabían del terrorífico video en donde guardias del INM se alejan de las celdas incendiándose y ninguno intenta, siquiera, abrir las rejas y salvarles la vida a los 39 migrantes guatemaltecos, hondureños, nicaragüenses, salvadoreños y colombianos. El horror.
La sombra del miedo y de la expectativa, nos cubre a quienes creemos que la Democracia en México está amenazada, cercada, por este nuevo grupo que llegó al Poder por el INE precisamente, el árbitro imparcial que tantos años de lucha nos costó a los mexicanos de esta generación, uno que cuenta los votos de todos, porque son el vecino y la vecina a los que conocemos de hace mucho: que nos ubican y rápido, en las hojas del listado nominal.
La primavera se siente. Ardiente y sola. Piel y ojos de testigos.
¿Qué va a pasar? Se siente como injusticia tener que estar lidiando con esto, volver a elecciones controladas, bajo sospecha, verdaderos retrocesos en México, de cosas creídas superadas: eso es algo que habrá que reclamar al Presidente, no había necesidad alguna de zaherir la Democracia.
Nos espera un ViaCrucis, es el presagio, pero este domingo será de “Ramos” y hay Esperanza en la resurrección de una Sociedad lastimada y puesta a pelear con sus hermanos.
Nos leemos el lunes, esperamos que renovados.