** “¡Zapata vive la lucha sigue!” era una de las tantas consignas coreadas por una oposición que hasta hace 3 años y antes de ser Gobierno, sí veía el progresivo avance y crecimiento de “proyectos inmobiliarios” en terrenos ejidales.

** Nada ha cambiado, al decir de organizaciones agraristas y campesinas que ayer tuvieron en Veracruz, cuna de la promulgación de la primera Ley Agraria de México en 1915, un congreso como parte de la conmemoración de la efeméride, y denuncian aparte de la falta de apoyos al Campo, una progresiva invasión a tierras ejidales para dar paso a proyectos inmobiliarios de lujo.

** A estas alturas para nadie en México medianamente informado, escapa el dato de que la mayor parte de la tierra disponible (más de la mitad del territorio nacional) es de propiedad Ejidal: el ejido, como núcleo fundamental de la organización agraria, comunal, es intocada por ley.

** Y para ello los 57 Tribunales Agrarios en todo el país, velan por el esquema y su desarrollo desde su creación; pero es en este gobierno de Andrés Manuel López Obrador, cuando los llamados “Tua” Tribunales Unitarios Agrarios, recibieron la primera embestida al padecer el recorte de Salarios a sus trabajadores, abogados profesionales con más de 15, 20 y 25 años de trabajo esforzado de lunes a sábado, y hasta domingos, pero que verán reducir sus Pensiones y Retiros drásticamente. “Cosa injusta”, nos diría AMLO en su primera “mañanera” en la ciudad de Veracruz hace tres años, y prometió: “se hará Justicia…” pero ésta, no ha llegado.

** Ayer, Alberto Galindo García, integrante de la Comisión Ejecutiva de la Coordinadora Nacional “Plan de Ayala” quien participó del congreso agrarista aquí en la ciudad, dijo que el gobierno federal de MORENA y los estatales sólo están “utilizando a la Reforma Agraria como instrumento inmobiliario”; y les recuerda que el sector campesino “es clave para la soberanía alimentaria”.

** Llamó al gobierno de AMLO a “evitar el desmantelamiento de las instituciones agrarias en el país o el campo colapsará y el costo de los productos aumentará de forma significativa…” advierte, al tiempo que le pidió a la Federación mejorar los presupuestos y las estrategias enfocadas a mejorar la productividad de la zona rural.

** Galindo García afirmó: “en los últimos años, incluido el actual sexenio, han convertido la poderosa reforma agraria en un instrumento inmobiliario de vivienda y pretenden dejar en el baúl de los recuerdos las instituciones agrarias del México que buscó la paz y estabilidad…”.

** Sostiene que como antes, el actual gobierno lo que busca es “detonar proyectos de infraestructura inmobiliaria en lugar de impulsar el campo productivo…” y junto con sus demás compañeros del sector agrario campesino, y los ejidatarios, pidió “alzar la voz” todos los involucrados para solicitar a este gobierno el “cambio de rumbo” y exigir que tal como fueron las promesas, se cumplan para impulsar verdaderamente el desarrollo del campo.

URBANISMO QUE NADIE QUIERE VER…

** Un mucho por la pandemia del coronavirus que nos encerró dos años, en actividades vía “zoom” hasta quedar casi como zombis, y que amenaza en este 2022 dar el coletazo que se espera sea el último, con contagios e infecciones de las nuevas variantes; es que la actividad constructora no paró en todo el país y Veracruz no fue la excepción.

** Mientras la mayoría padecía la reclusión forzosa, grandes medianas y pequeñas construcciones no dejaron de alzarse en estos dos años: sin vigilancia de autoridades de ningún tipo. Así como en la ciudad de Veracruz se alzaron torres y edificios en el centro y la costera con más de diez y quince pisos, en Alvarado, las cooperativas de pescadores y los habitantes de Mandinga, protestaron y siguen haciéndolo, contra el progresivo arrase de los Manglares, en una zona protegida se supone, como Sitio Ramsar.

** Ahí el urbanismo que “nadie ve”, y la inacción de alcaldes como Gustavo y Bogar Ruiz, que cedieron visiblemente; la laguna de Mandinga que antes era un paraíso ahora está en peligro: tapados sus veneros como el sistema lagunar de la ciudad de Veracruz que tampoco ninguna autoridad pasada vio, y la actual ni la menciona, y ya está colapsando.

** No sabemos si la nueva alcaldesa de Alvarado Lizzete Álvarez Vera, que llegó por el Partido Verde Ecologista de México, remontado ya el ataque gubernamental que casi le tumba la alcaldía de La Generosa, esté dispuesta a entrarle a frenar a los voraces quienes se sienten dueños de Veracruz y del país. Es tiempo de rescatar no sólo Mandinga, sino toda la riqueza natural alvaradeña. Ella tiene la Palabra.

VIERNES QUERIDOS: QUE LES SEA PACÍFICO Y AMOROSO. NOS LEEMOS EL LUNES CON AYUDA DIVINA…