CIUDAD DE CURITIBA, BRASIL., 13 de Abril, 2020.-El pasado 3 de febrero, el Ministerio de Salud de Brasil ya había decretado el “Estado de emergencia en salud pública”.

Como este decreto, el Ministerio de Salud pudo elaborar un plan estratégico, como una forma de prevenir lo que podría suceder en el país.

Durante este período, también se informó que se estaba llevando a cabo un seguimiento de las personas que regresaban de sus viajes en los siguientes países: Alemania, Australia, Camboya, Canadá, China, Corea del Norte, Corea del Sur, Croacia, Dinamarca, Emiratos Árabes Unidos, España, Estados Unidos, Filipinas, Finlandia, Francia, Grecia, Países Bajos, Indonesia, Irán, Italia, Japón, Malasia, Noruega, Reino Unido, San Marino, Singapur, Suiza, Tailandia y Vietnam.

Como resultado, se estableció que todas las personas que llegaron a Brasil fueron consideradas sospechosas durante un período de 14 días y debían permanecer bajo observación.
Este protocolo fue un intento de aislar a las personas que trajeron el virus y de alguna manera llevar a cabo una especie de control.

Sin embargo, lo que estaba detrás era que el Sistema Unificado de Salud Pública, SUS, ya no tenía una estructura que pudiera ayudar a las personas que se infectarían, ya que se estaba desmantelando para un proyecto más grande; el de su privatización, por parte de los gobiernos que precedieron a la presidenta Dilma, en una política neoliberal abrumadora nunca antes vista en el país.

UN BRASILEÑO QUE VIAJÓ A LOMBARDÍA EN ITALIA...

Sin embargo, el 25 de febrero, en medio del carnaval, un hombre de 61 años que había regresado de la región de Lombardía en Italia, tenía la confirmación y fue ingresado en
el Hospital Israelita Abert Einsten con el virus.

El hospital privado más caro de São Paulo. El 26 de febrero, otros 59 casos sospechosos ya habían sido descartados después de que las pruebas de laboratorio mostraron resultados negativos para el coronavirus.

En una entrevista, el Secretario de Vigilancia Sanitaria, Wanderson de Oliveira, declaró que en el país había 20 casos sospechosos, de los cuales 2 personas habían visitado Italia, 2 Alemania y 2 Tailandia.

Según el “este patrón ya refleja la velocidad que el Sistema de Salud, incluidas las unidades públicas y privadas, tuvo que adaptarse a las nuevas definiciones de casos sospechosos en estos dos días, durante el Carnaval.

“Nuestro sistema de salud está en alerta máxima ”, dijo Wanderson. “Estamos en la fase de contención, donde buscamos evitar que el virus se propague. Si se propaga,
pasaremos a la fase de mitigación, que es evitar casos graves y muertes", explicó elsecretario.

EL HALLAZGO: EL VIRUS QUE RICOS CONTAGIARON A POBRES…

Una cosa es segura: de que el virus llegó a nuestro país en personas de los estratos sociales medio y superior, es decir, aquellos que tienen el poder adquisitivo que les permite viajar al extranjero en un período que cuesta R $ 5,00 para comprar un dólar en Brasil (cinco reales).

Todas estas personas pueden ser tratadas en hospitales privados y esta ha sido la regla en la mayoría de los casos.

Lo preocupante es que, además del Sistema Único de Salud, el SUS también carece de estructura, y también hay una lucha de poder en el gobierno central entre el presidente Jair Messias Bolsonaro y el ministro de Salud, el doctor Luiz Henrique
Mandetta.

BOLSONARO VIAJÓ CON COMITIVA A ESTADOS UNIDOS, DONDE HAY MÁS MUERTOS QUE EN TODA AMÉRICA…

El presidente Jair Messias Bolsonaro, desde el comienzo de la crisis causada por el virus, se ha comportado de manera incorrecta, primero hizo un viaje a los Estados
Unidos el 7 de marzo, con 45 personas. Entre ellos se encontraban gobernadores, líderes políticos y técnicos de varios estados de Brasil que se quedaron allí durante 4
días.

Un día después del regreso del viaje, que tuvo lugar el 11 de marzo, el Secretario de Comunicación de la presidencia de la república Fábio Wajngarten fue detectado con el
coronavirus y de allí surgió la duda de que las dos pruebas realizadas al presidente Jair Messias Bolsonaro fueron falsas; por negativo Populista, como es, el 26 de marzo de 2020, los
medios de comunicación dijeron que no era una gripe pequeña lo que lo enfermaría, porque es un atleta y que lo alarmaban porque esta pandemia era solo un resfriado.

Esta locura se mantuvo tres días después de que se confirmó que 23 personas que estaban en el grupo que viajó a los EUA estaban infectadas. Desde entonces, ha hablado con todos los
periodistas de la prensa y estado muy cerca hasta tocando y besando a las personas de la población, que lo admiran, en la puerta del Palacio de Alvorada (Amanecer) donde vive, en la
capital de Brasil, Brasilia, sin tener en cuenta las reglas de usar mascarilla y mantener su distancia con la gente, esto causó un desajuste entre él y el ministro de Salud, Luiz Henrique Mandetta, que dijo que la mejor manera de no colapsar el Sistema de Salud es mantener las reglas de desprendimiento social (el distanciamiento social que es aquí en México) entre las personas, y que éstas se queden en sus hogares, saliendo de sus casas solo en casos esenciales para compra
de comida y medicina, con guantes y mascarillas.

BOLSONARO, SIN MASCARILLA Y SIN DISTANCIAMIENTO SOCIAL, SE REUNIÓ CON EVANGÉLICOS…

El pasado lunes 6 de abril, el ministro Luiz Henrique Mandetta fue casi retirado del
gobierno.

Esto se debe a que el domingo 5, una vez más, Bolsonaro se fue por la mañana afuera del Palacio da Alvorada, donde vive en Brasilia y se reunió con pastores evangélicos, entre otras cosas, dijo que usará un bolígrafo contra las personas en su gobierno que se creen y se convirtieron en
“estrellas”

Sus palabras a sus partidarios fueron que “algunas personas de su gobierno de repente se convirtieron en estrellas, y hablaron por los codos, y que no tiene miedo ni está aterrorizado de usar la pluma contra ellos”.

Sin embargo, dijo que “aún no ha llegado su momento”; esto después de que tres días antes declarara que ninguno de sus ministros es “inadmisible”, según él, el Ministro de Salud carece de “humildad” ya que están “picoteando”;.

EL MINISTRO DE SALUD Y GOBERNADORES, HABÍAN DECRETADO EL CIERRE DE ESCUELAS, Y FÁBRICAS, EL DISTANCIAMIENTO SOCIAL Y MEDIDAS DE PREVENCIÓN, A PESAR DE QUE EL PRESIDENTE NO LAS CONSIDERABA

La actitud del Ministro de Salud llevó al presidente Jair Messias Bolsonaro a encender
la pipa de paz el lunes.

Por la noche, el ministro habló por la red nacional de radio y televisión para decir que se había
reunido con el presidente y que había resuelto los puntos de desacuerdo.
Informó también que en realidad ya habría retirado sus cosas de los cajones de su escritorio en el
Ministerio con la ayuda de los funcionarios.

Sin embargo, después de una semana, ayer por la noche, el ministro que se alió con varios gobernadores de los estados del sur, sureste y centro y oeste, que impusieron
restricciones al movimiento de personas, cerrando escuelas, tiendas, fábricas, en la
dirección opuesta que proclama el presidente Jair Messias Bolsonaro.

Esto se suma a las acciones de los gobernadores de los estados del norte y noreste de Maranhão, Piauí, Ceará, Rio Grande do Norte, Paraíba, Pernambuco, Alagoas y Sergipe que formaron un grupo y han causado muchas molestias al presidente desde su toma de posesión.

En esta acción, acerca del Coronavirus 19, sus actos son contra las determinaciones del presidente que pide a los trabajadores que regresen a trabajar y a los comerciantes a abrir sus tiendas. De los 27 gobernadores que tiene el país, hay 25
en contra.

¿A QUIEN ESCUCHAR?

Hoy, 13 de abril de 2020, los brasileños tienen dudas sobre qué escuchar, ya sea al presidente Jair Messias Bolsonaro o al ministro de Salud, Luiz Henrique Mandetta.

Esto se debe a que el Ministro que normalmente hace una rueda de prensa todas las noches en Brasilia, utilizó el Palacio das Esmeraldas, la sede del gobierno del estado de Goiás en una entrevista exclusiva para el programa del domingo por la noche
“Fantástico”;, un programa de variedades en Red Globo de televisión.


Según los analistas, el discurso del ministro puso otra piedra en los zapatos del presidente Jair Messias Bolsonaro, ya que el gobernador de Goiás fue un fanático partidario del
presidente y hace 15 días fue uno de los más combativos en la reunión que los gobernadores tuvieron con él, para hablar de acciones conjuntas y apoyo financiero a los estados para combatir la pandemia.

Después de esa reunión, el presidente se aisló aún más de
sus apoyadores políticos.


LOS GOBERNADORES CONTRA EL PRESIDENTE…


Los gobernadores firmaron una carta en la que declaran: “Continuaremos adoptando medidas basadas en lo que dice la ciencia bajo la guía de profesionales de la salud,
capacitados para enfrentar la realidad actual”. Y concluyeron con la frase: “Mantendremos las medidas preventivas revisadas gradualmente de acuerdo con los Registros, informados por las agencias oficiales de salud de cada región”.

ESTIMACIONES FUNESTAS PARA BRASIL: SE ESPERA 1 MILLÓN DE MUERTOS...

Si bien las disputas políticas continúan en Brasil hoy, tenemos el 13 de abril de 2020, 22 mil 169 casos confirmados de Coronavirus, y 1,223 muertes, según el Ministerio de Salud y no
hay para donde correr, pues las estimaciones son que tendremos más de 1 millón de muertes hasta que la pandemia pase en los próximos dos o tres meses.

¡Deseo mejor suerte a los mexicanos! ¡Quédense en sus casas! Es lo único que nos puede ayudar en estos tiempos de peste, cuando lo que se juega son cuestiones que tienen que ver con Biopolíticas y el Biopoder.