La niños deben regresar a las aulas por salud mental y ya que continuar encerrados podría afectarles su salud, consideró el el obispo de la Diócesis de Veracruz, Carlos Briseño Arch.

Señaló que se tendrán medidas sanitarias correspondientes para evitar contagios dentro de los centros educativos.
“Tenemos que seguir viviendo y adaptandonos. No podemos cerrar la vida de las personas y sobre todo de los niños porque estar encerrados los va a afectar. Necesitan que les demos cierta normalidad”.

En otro tenor, indicó que los familiares de personas desaparecidas dejaron de acudir a las misas debido a que se contagiaron de coronavirus o tienen en casa personas enfermas.

“Muchos de los que eran constantes se enfermaron de Covid y hay muchos que tienen miedo. Muchos no vienen porque o está enferma o tiene a alguien enfermo o se le ha muerto alguien y tienen miedo. No es que no quieran venir”.

Señaló que actualmente sólo acude el 30 por ciento de los feligreses a misa.