XALAPA, VER., 27 de Junio, 2018.- A siete días de haber muerto el niño de ocho años, Cristo Fernando J. T., en el elevador del puente peatonal que comunica a la secretaría de Educación de Veracruz (SEV) con la plaza Américas, el lunes aparecieron el padre del menor, José Antonio Jiménez y un abogado defensor del caso, Gabriel Salas, quienes afirmaron que la administración del centro comercial podría hacerse acreedora a una sanción por responsabilidad civil y penal.

El abogado informó que interpusieron una denuncia ante la Fiscalía General del Estado (FGE) y se inició la Carpeta de Investigación 33/89, porque aunque se habla de una falla mecánica del elevador, "lo cierto es que le pudo haber pasado a cualquier persona”.



El jurista indicó que el elevador presentaba fallas desde semanas anteriores, y así como falleció el menor el pasado 19 de junio, de la misma manera le pudo ocurrir a otros usuarios, por lo que presentarán denuncia penal y demanda civil ante la FGE.

“Alguien tuvo que ser responsable del mal funcionamiento del elevador, no hay duda de que falló. La mecánica de los hechos está en investigación y pedimos justicia. Porque en las redes sociales la gente habla de omisión de los padres, pero si el papá hubiera estado a un lado del elevador, este hubiera fallado e igual hubiera consecuencia fatídica y el encargado del elevador es Plaza Américas” dijo.


Criticó que autoridades del gobierno del estado han apoyado con atención psicológica a la familia de Cristo Fernando, pero “es mínima y muy lenta” y de pasó se mostró inconforme porque “los medios de comunicación dieron una mal información que dieron vuelco al caso”.

“Queremos establecer que el elevador fue el que falló le pudo haber pasado a cualquier niño, tal vez a uno menos vulnerable de situación económica, sin embargo fue una situación de negligencia. Hay responsabilidad penal y civil y las dos vías las vamos a ver de forma legal” señaló el jurista.

Tanto el abogado como el padre del menor, señalaron que Cristo Fernando no pedía limosna en la calle, sino que se dedicaba a recolectar material de reciclaje.

“Pero bueno, Cristo era un niño que estaba en su casa y junto con otros compañeros vinieron a jugar el elevador, y bueno sucedió la tragedia que ustedes ya saben. Y si ven la fotografía era un niño cuidado y no de calle como lo dijeron los medios” señaló.



Por su parte un amigo de la familia del menor de edad, Omar Mejía Cueto hizo uso de la voz para decir que los dos niños Cristo Fernando y su primo con edad de 10 años no asistían a la escuela porque su padre, José Antonio Jiménez no tuvo dinero para inscribirlos en el ciclo escolar 2017 - 2018.



Lamentó que los ciudadanos a través de redes sociales han criticado al padre del menor, porque el día que cayó al elevador y falleció se encontraban solos en la calle.

“No es lo mismo pensar en un niño de cinco años que anda en la calle, que en un niño de ocho años, porque a uno de cinco no lo dejas salir, pero al de ocho años lo dejas ir a la esquina a jugar con el primito. Qué hacían dos niños en un elevador? Jugando lo mismo que unos niños de su edad. No iban a la escuela porque no hubo dinero” expuso.



Dijo que Cristo Fernando tiene cuatro hermanos más, “y son varones que tienen que salir a trabajar, son gente humilde, y sus hermanas también. Y los que se quedan en casa tienen que cuidar a niños de año y medio así que ya pueden imaginar como vive la familia”.

Finalmente el amigo de la familia dijo que el número del teléfono celular del padre de Cristo Fernando es el 2282550183 y si alguien desea apoyarlos económicamente ahí lo pueden contactar.