De suma importancia en los felinos, mucho de su calidad de vida y supervivencia depende de ellas, al ser uno de los órganos más desarrollados, y sensibles.
Las vibrisas, comúnmente llamadas bigotes, son mucho más largas y gruesas que el resto de los pelos “normales”, alojadas dentro de un folículo piloso 5 veces más grande que uno de pelo normal.
De manera inmediata vemos las vibrisas del gato en la cara; específicamente encima de la boca, estas se llaman mistaciales, y forman cuatro filas; sobre los ojos las superciliares, y forman 2 mechones uno encima de cada ojo; a los lados de los carillos, y en las patas traseras y delanteras parte inferior. Debajo de las orejas las vibrisas generales, y una un poco imperceptible es el mechón mandibular.
Cada vibrisa está unida a un musculo que le permite movimiento o control independiente, aunado a los receptores nerviosos extremadamente sensibles.
Un gato no ve a una distancia muy corta, a 30 centímetros; a esta distancia su nitidez empieza a degradarse, y mientras más cerca este del objetivo su capacidad de un enfoque efectivo es menor; esta característica es un vestigio hereditario indeseado, de su origen carnívoro, ya que al ser cazador su visión quedo diseñada para localizar y enfocar hacia adelante y a largas distancias.
En buenas condiciones lumínicas tiene una excelente capacidad visual, sin embargo, todos sabemos que es un cazador crepuscular y nocturno.
Es aquí donde entran en juego las vibrisas, sus “bigotes” ante poca o nula visibilidad, a una distancia tan corta le permite crear una imagen en 3D. Gracias a los receptores que pueden detectar presión, movimiento, velocidad y dirección del viento, lo que en conjunto le da la información de un objeto o animal cerca, compensando la poca visión de cerca que tiene.
Cuando está al acecho con la presa a muy corta distancia las vibrisas le dan la capacidad de medir la distancia, y si la presa se mueve tiene la particularidad de mover las vibrisas hacia adelante, atras, a los lados, redirigiendo el escaneo de la ubicación de la presa, y asi poder redirigir el ataque ¡¡¡impresionante!!!
Como cualquier otro pelo del cuerpo animal, las vibrisas pueden caerse, pero son reemplazadas inmediatamente, considerándose normal.
Es muy importante que dejes las malas prácticas de cortarle los bigotes al gato, el daño que les estas ocasionando quizás tu no lo percibas, pero es inminente y ni que decir de jalarle las vibrisas, el dolor será intenso.
Si cortas sus bigotes ocasionaras además de todo lo anterior una desorientación en el gato.
Esa mala costumbre de cortarle los bigotes paraqué no se vaya de la casa, caray mejor dale cariño y comida y lo tendrás ahí todo el tiempo.
Ponle comida y agua en recipientes poco profundos y amplios donde sus bigotes no rosen pues al ser tan sensibles hay una reacción en el felino.
Si es mucha la tentación ¡¡córtate los tuyos y deja al gato en paz!!
Por una vida animal digna.
Mvz Amílcar Meza Rdguez.
El Arca Wamerú