12.Septiembre.2022
DAKTARI JAROCHO
LESIONES DE CUELLO EN MIS MASCOTAS: CULPA MÍA O DEL COLLAR. 
Por MVZ AMÍLCAR MEZA
MVZ AMÍLCAR MEZA
Amílcar Meza Rodríguez es jarocho y Médico Veterinario Zootecnista, egresado de la Facultad de Veterinaria de la Universidad Veracruzana. Titulado y con cédula profesional. Con registro ante SAGARPA, Clave: ver-0316-jun-15.

Rescatista y protector de animales. Con amplia experiencia y formación continua en clínica de pequeñas y grandes especies animales, domésticos y silvestres. Especialista en Peritaje sobre maltrato animal, aplicado en operativos.

También en Dermatología canina y felina. En Diagnóstico y tratamiento de las principales enfermedades articulares en pequeñas especies. Resolución de fracturas de fémur en perros y gatos. La Certificación ante SAGARPA fue para Capacitación de médicos veterinarios, para establecimientos comerciales, Clínicas, y hospitales veterinarios.

Entre sus publicaciones especializadas está el Reporte de casos de maltrato animal observados en clínica privada durante 10 años; presentado a la UV. Ha sido Jefe del área médica del Centro de Salud Animal de la ciudad de Veracruz, y encargado de proyectos productivos de la Subdirección de Desarrollo Sustentable.

En el CSA, ofreció consultas, cirugías en general, campañas de esterilización y vacunación masiva en colonias, en colaboración con el departamento de zoonosis de la Jurisdicción número 8.

Con la colaboración de la fundación Donkey Sanctuary, realizó el Diagnóstico, tratamiento y censo de la tracción a sangre en el municipio de Veracruz. Y la atención y seguimiento de los reportes de maltrato animal en pequeñas, grandes especies y animales silvestres.

Actualmente, es miembro activo de APASDEM. Asociaciones protectoras de animales de México. Presidente de la asociación de rescate y cuidado animal: EL ARCA Wameru. Y Vicepresidente de la asociación estatal de médicos Veterinarios Zootecnistas en fauna doméstica y silvestre. A.C. MVZ. FADYS.

Amílcar fue por varios años, el autor constante de la "Columna Invitada" de estas páginas Mercuriales. Los lectores estarán de acuerdo que se ha ganado, a pulso, ya no ser invitado: sino de la Casa. Bienvenida la nueva época de nuestro daktari (en suajili doctor, sí: de la mítica serie norteamericana de los 70...).

Esta columna aparece, dominicalmente a veces, también en NOTIVER. Que sean muchos años más...
DENUNCIAN A YUNES LINARES POR AGRESIÓN
Columnas anteriores
DAKTARI JAROCHO
29.Abril.2024



 


Pocas ocasiones nos preocupamos y ocupamos de enseñarle a nuestro perro a caminar con correa o a estar en un lugar de casa encadenado, sujeto de correa y collar. 


Recordemos que todo es un aprendizaje, el objetivo no es sujetar a la fiera y que se lastime o incluso llegue a ahorcarse, es enseñarle que en determinado momento se necesita que este en un sitio, pero cómodo pues la sujeción generalmente es por cuello. 


El canino no sabe estar sujeto y como resultado, al pasearlo se jalonea se tira de la correa, lo mismo ocurre si en casa necesitamos sujetarlo un rato, no sabe, es inquieto, y vienen los jaloneaos. 


El cuello en todos los animales incluyéndonos es muy delicado, es una zona por la que transitan hacia el cerebro numerosos sistemas, y esto por la propia anatomía, arterias, nervios, músculos, vertebras, la glándula mandibular, la tiroides, ganglios linfáticos ubicados en las vértebras cervicales, esófago, tráquea; y ojo cuerdas bucales. de repente el can se quedó mudo y no saben por qué. 


Los daños ocasionados son graves. Por ejemplo, si se dañan las vértebras cervicales podemos tener mucho dolor incluso parálisis. 


 La tención de la correa es la que genera el estrés en el animal claro sujetando el collar, los tironeo, jaloneos pueden ocasionarle calambres y un cambio de conducta, incluso antisocial. 


Antisocial porque parte de la comunicación de los canes es el lenguaje corporal mismo que se ve afectado por la tensión de la correa, y al estar en este “estado” el mensaje no será el mismo. 


No caminara de forma natural emitiendo esos mensajes corporales, el receptor no tiene claro las intenciones del can sujeto con collar y correa por lo que el recibimiento no será grato. 


La postura forzada y los tirones hacen que el collar presione sus vértebras y les cause contracturas y otras lesiones. 


Los efectos secundarios pueden ser bastante graves: dolores articulares, aumento de la presión intraocular, hernias, dolor crónico y hasta problemas comportamentales. 


Solución hay, enseñémosle a nuestra mascota a caminar, que el paseo no sea una competencia de haber quien tira más fuerte, que aprenda a caminar tranquilo sin tirones y obedeciendo tus indicaciones, cambia de collar a arnés o pechera, así no se lastimara el cuello y sus componentes. 


Los tirones de “corrección” pueden ocasionar daños tan graves como hernias, pinzamientos y hasta problemas neurológicos. 


 


El impacto del collar en el cuello afecta a los nervios de la zona y como estos se distribuyen por la médula espinal del animal. 


 


El arnés reparte la tensión en el pecho, una zona más fuerte y menos dolorosa que el cuello. Y nos hará más fácil su manejo. 


Enséñale a tu mascota con premios y evita collares, úsalos meramente con un accesorio, no como un método de sujeción. 


Notas algo “raro” acude con tu medico veterinario y no le mientas, porque a todo dicen: no como cree que lo voy a encadenar. 


Por una vida animal digan  


MVZ Amílcar J. Meza Rdguez. 


El arca Wamerú. 


 


  



  QUIÉNES SOMOS  
© Toda la información de este Portal Informativo está protegida por la Ley de Derechos de Autor Los medios que deseen reproducirla pueden contratar.