Conocido también como enfermedad de Buyo-Sokolsky; afecta el tejido conectivo de todos los órganos y sistemas. Afecta a animales desde los 6 meses de edad hasta edades muy avanzadas.

A menudo los cachorros desarrollan reumatismo, pero al fortalecer su sistema inmune este desaparece y no se repite, sin embargo, en perros de mediana edad y/o mayores se puede volver crónica, y temporadas de mucha humedad e invernal se agrava el problema.

Miren otro problema es el cambio de temperaturas que nosotros ocasionamos. ¿Cómo?

El clima esta cálido soleadito y lo metemos a bañar en agua fría. Traes corriendo al perro ejercitado caliente y lo mojas con agua fría. O al clima. Cuidado.

¡Si! los factores externos como el clima pueden ocasionar reumatismo, su lugar, patio, perrera, jaula que siempre este bajo humedad, mojada, aquellos animales que viven en la orilla de ríos, canales o lagunas (hola rocko F.M.) serán mucho más susceptibles y propensos a desarrollar reumatismo.

las enfermedades reumáticas se registran en temporada baja, en otoño y primavera en tiempo húmedo.

Todos estos factores son importantes y determinantes, sin embargo, una infección por estreptococos sería el mayor de los riesgos; puede iniciar con un dolor de garganta, que desencadene en faringitis, Incluso aquellos pacientes que han padecido de anginas.
Hay una cierta predisposición del cuerpo canino hacia el estreptococo.

Dentro de estas predisposiciones hay algunas razas determinadas a heredar el reumatismo, ¡si genéticamente se hereda!

Chow Chows, Terrier, Pekines, Staffordshire de América del sur, entre otros.

El aumento de la duración de una enfermedad, o síntoma grave que debería ser limitada, depende muchas ocasiones del propio curso que tome la afección, y en otras ocasiones obedece a complicaciones.

Cuando esta exacerbación se presenta los médicos la llamamos fiebre reumática, pero nota que es una consecuencia agravada por el reumatismo.

Si notas:
Claudicación intermitente, cojera de una o diferentes patas, debilidad o rigidez en las partas traseras, dolor muscular, que tu mascota se niega a moverse, si lo estas paseando, se detiene más de lo normal, no salta, ya no se sube a tu cama o al sofá, grita con un movimiento que generalmente seria común e inadvertido.

Algo muy fácil de observar, ya no mueve la cola, tiembla. Y nada tiene que ver su apetito, este no cambiara significativamente. Esta muy inquieto, se queja, no encuentra una postura para echarse y esto porque hay dolor, finalmente tomara una forzada.

Todos estos síntomas pueden presentarse en diferentes combinaciones y claro esto obedece al grado o nivel de severidad que este presentando nuestra mascota.

Frecuentemente se acompaña de una inflamación del revestimiento de la vejiga y que puede llegar a ser purulento, una cistitis.

Ante esto, no todo es desalentador, el primer paso es prevenirlo, evitando el enfriamiento de la mascota, ya tenemos el problema encima, hay tratamiento, y forma de darle calidad de vida al paciente reumático.

No mediques tú, acude con tu médico veterinario para valorar cual es el nivel de afectación que hay y en base a eso poder hacer un esquema de ataque o control.

Por una vida animal digna
MVZ. Amílcar J. Meza Rdguez.
El Arca Wamerú.