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**.Llegamos al fin de 2014 en medio de enormes contrastes en lo personal y en lo colectivo: como paí­s cerramos un ciclo trágico cuyas heridas siguen abiertas, como son todas las que no encuentran sanación alguna que no vengan de la Justicia; y en lo individual cada quien hará el balance casi siempre cargado hacia las apetencias, y muy pocas veces hacia la Gratitud:por lo que se tiene, y que por tenerlo, no se aprecia.<br />
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** El fin de un año mas supone, para muchos, la tragedia personalí­sima de no contar con todo el dinero que quisieran para volcarse al consumismo: para ellos no habrá nunca conformidad ni sosiego: siempre querrán más y siempre se mostrarán enfermos de tanto compararse con sus familiares, con sus amigos, con sus vecinos. <br />
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** Otros muchos mas, después de una vida productiva pero acompañada de excesos donde olvidaron deliberadamente a quienes dependí­an de ellos en lo material y en lo afectivo - generalmente esposa e hijos- o simplemente vivieron haciendo daño de palabra u obra a todos quienes tení­an la desdicha de estar cerca de ellos; ya en la decadencia de la Vejez, la Enfermedad o la Improductividad, o todo junto, en fechas como la de hoy buscan desesperadamente quien los escuche o los acompañe: generalmente sin resultados. <br />
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** Porque aunque no crean, existe, y es algo que los creyentes llaman "karma".<br />
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** Y entonces recordamos que "somos lo que pensamos" como reza la sentencia Budista; que al final de cuentas y como advierten los dichos o los textos bí­blicos: "hay un tiempo para todo"; un tiempo, se dice "de echar cuetes y otro de recoger las varas..." ; que "se cosecha lo que se siembra..." y ese mas admonitorio: "el que siembra vientos, cosecha tempestades..." <br />
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** Particularmente el Fin de Año supone para la mayorí­a, el recuento: y depende de como se haga este y para qué, es lo que marca la Diferencia. <br />
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** Recordar no es recontar, si es que tal cosa existe: entonces se hace el inventario personal del año para simplemente comprender que "lo malo" tuvo que tener un por qué, y que no tiene caso pretender quedarnos con "solo lo bueno" porque estaremos cometiendo el error de no haber aprendido nada: se aprende mas a veces de "lo malo" que de lo que es enteramente bueno y por ello incuestionable. <br />
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** Muchos en México tendemos a hacer "el balance" anual de Fin de Año ligándolo a los resultados como paí­s: y no se anda tan errado. Porque la acción individual, sumada, hace la experiencia colectiva. <br />
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** Muchos mas no comprenden la ecuación, y solo culpan "al gobierno" de cualquier signo, de todos los males que acontecen en su dí­a a dí­a. No son los mas, aunque a veces lo parezca. Afortunadamente. <br />
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** Llegamos al fin de un 2014 aciago para nuestro paí­s en muchos sentidos: las reformas energética, educativa y fiscal, se sumaron pero también se opacaron en la tragedia de un septiembre mas que negro con los Desaparecidos de Ayotizanapa y con la convicción, nacional, de que la narcocultura hace mucho es parte de la Clase Polí­tica de nuestro paí­s: en todos los niveles, pero con sus honrosas excepciones a todo lo largo del territorio. <br />
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** A pesar de ello, también tenemos la convicción profunda de que México es único y tiene una mayorí­a, aunque silenciosa aun, noble y edificante en muchos sentidos: nuestra comunidad cientí­fica; nuestra comunidad médica y de enfermeras; la comunidad artí­stica, nuestros maestros así­ como nuestros jóvenes y niños: los que estudian, los que trabajan, los que producen y sobre todo los que crean e innovan. Por todo el paí­s y en todos los rincones, son mas los buenos que los criminales que mantienen secuestrado al paí­s desde todos los frentes: en el llamado crimen organizado o desde partidos y grupos de poder. <br />
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** Pero se mantiene la Esperanza: porque remontemos sobre adversidades y condiciones actuales y afrontemos el siguiente 2015 convencidos de que podemos: sí­ podemos salir adelante y ser mejores: como personas y como paí­s. <br />
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QUE PASEN TODOS UN PACíFICO FIN DE AÑO. ¡FELICIDADES!<br />