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** Amanecemos y la madrugada no nos sorprende: desde que despuntaba le aguardábamos el sitio y así­ ha sido, más o menos un dí­a sí­ y varios también, desde hace dos años.<br />
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** Llegamos hoy 3 de diciembre de 2014 a nuestro segundo aniversario como diario digital y a veces no nos la creemos en este sentido: confirmar que trabajamos para un periódico, que tenemos un oficio que nos arraiga a la tierra, que nos hace levantarnos cada dí­a y acostarnos, como ahora, al amanecer: cuando otros se están, precisamente, levantando de sus camas.<br />
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** Las horas nocturnas y las de madrugada son tan especiales: sólo lo comprenden quienes las viven como son: una especie de `estar medio despierto` o `medio dormido`; una `duerme vela` que nos hace alucinar, desvariar, proyectar, construir más castillos y más puentes, y más sitios y situaciones ideales: para nosotros, para los amigos, para los amados: para todos, para el paí­s entero.<br />
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** Madrugadas que nos hacen, sobre todo, pensar: en que los cambios favorables para México son posibles. Que todo esfuerzo colectivo movido por lo mejor que tiene nuestro paí­s, no puede, no debe, irse al depósito del Olvido.<br />
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** Celebramos un aniversario, el segundo, con el í­mpetu del dí­a 3 de ese que se antoja lejano y distinto 2012: después de sortear los avatares de un Mercurio impreso que fue la semilla de este digital y que para mi significó algo más que una ruptura con el tradicional medio impreso: una transformación radical de paradigmas hasta entonces sostenidos a golpe de entusiasmo y de voluntarismo propio de personalidades rayanas en lo infantil.<br />
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** El Mercurio de Veracruz me ha hecho crecer. Y como decí­a el maestro de Biologí­a de Javier Duarte: duele. Y mucho. Lo he comprobado en estos últimos doce meses.<br />
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** Pero en el dolor, hay siempre, el amor propio que nos da forma, nos moldea y nos perfecciona: y si está acompañado del Bendito Humor, ese que nos hace reí­r cuando se supone debiéramos llorar, ya mis padres pueden sentirse satisfechos: por primera vez en mi vida, y así­ se lo comentaba hace unos dí­as, a mis hermanas insustituibles: por primera vez repito, conozco lo que mi madre siempre anheló para mí­, sabedora como buena sabia, de lo que significaba no experimentar dicha sensación: me sentí­ conforme. <br />
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** Por primera vez en mi vida hace unos dí­as, experimenté lo que es eso: estar conforme, satisfecha. Nada que ver con el conformismo. Es distinto. Estar conforme es estar bien: sentirse en Paz. Sentirse justamente retribuida por la Vida en proporción directa al trabajo y esfuerzo empleado. Aunque se tengan o se crean tener, muchas carencias de todo tipo. <br />
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** Hace unos dí­as experimenté la Paz que resulta de confirmar que se está en el sitio en que se quiere estar; haciendo lo que más nos gusta; viviendo, agradecida, el momento; valorando en su modesta dimensión, los logros personales y profesionales obtenidos. Disfrutando de leer: he terminado por lo menos, tres libros en poco menos de un mes; he vuelto a escribir y no me refiero a sólo esta columna o mis obligadas notas del dí­a; he vuelto a pensar para crear; para disfrutar. He vuelto a bailar y me pregunto por qué lo habí­a dejado. Es maravilloso. Y la sensación que produce hacer todo lo anteriormente descrito, es de liberación total.<br />
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** Hoy tengo mucho que celebrar: nuestro segundo aniversario como diario me ha supuesto el conocer a un equipo extraordinario de trabajo. No puedo por menos que agradecer a Paty Recio su dedicación entusiasta a esto que ya dejó de ser proyecto para ser realidad diaria. A Charo Hermida: amiga completa y solidaria cuya compañí­a ha sido fundamental; y por supuesto al pequeño pero gran equipo de colaboradores: Claudia Martí­nez, Luis Rey Ortiz, Enrique Piña, Myriam Serrano, Jassiel Juárez, José Cervantes y Josué Ledesma. A los que se han tenido que ir, por distintas razones, les doy las gracias también: a Joshua Ferrer, estupendo diseñador, creativo y sobre todo leal y buen amigo. A Donato Dobarganes y a Horacio Zamora. Gracias de verdad por sus aportes que hicieron a este diario.<br />
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HOY EL DICCIONARIO A LA DIABLA SE GUARDA PARA ACEPCIONES MÁS RUDAS ACASO, QUE IMPONGAN LOS VENIDEROS DíAS. <br />
HOY, SOLO ESTAMOS MUY CONTENTOS Y LES ENVIAMOS, A CAMBIO, UN GRAN ABRAZO.<br />