El suicidio en niños y adolescentes es cada vez más frecuente por la pérdida de valores, afirmó el Obispo de Veracruz, Carlos Briseño Archa.

Lamentó que una niña de 12 años se haya quitado la vida en la Ciudad de Veracruz porque presuntamente sus familiares le quitaron el celular.

“A veces no hay ningún trasfondo (para el suicidio) a veces es por una cosa que no tiene ni valor, la gente pierde porque se peleó, porque reprobó un examen, pero en el fondo es por la falta de valores, a veces nuestra fe nos da esa capacidad de poder afrontar las dificultades y poder manejarlas y vivirlas de una forma más positiva y relativizar muchas cosas que no son trascendentes como la pérdida de un teléfono”.

En entrevista posterior a la primera misa que ofreció como Obispo de la Diócesis de Veracruz, afirmó que los padres deben deben inculcar valores morales y religiosos a los infantes.

“Son los principales educadores los papás, no solo a nivel de educación normal y humana, si no también educación cristiana que es con ellos con los que tenemos que trabajar fuerte para que ayuden a las nuevas generaciones y las sostengan a vivir una vida mejor”.

Por último recordó que San Joselito, dio la vida a sus 14 años por otra persona y esa muestra de amor lo ha llevado ser consagrado como Santo y las nuevas generaciones asuman la Fe para ser una mejor persona.