Ante la polémica desatada sobre la potestad del Atletismo Veracruzano que ha llegado límites que rayan en un solo punto, tener el poder a como dé lugar.

Israel Francisco Benítez Morteo, quien desde el día 04 de marzo de 2018, reiteró en una entrevista que la Comisión de Apelación y Arbitraje Deportivo (CAAD) dio su resolutivo final y ordenó a María de los Ángeles Ortiz que lo reconozca como presidente “legítimo” de la Asociación Veracruzana de Atletismo, pero sin presentar alguna documentación actual.

Benítez Morteo, desde su muy particular punto de vista, ha sido reiterativo al señalar a las autoridades estatales deportivas como responsables de un tema que solo atañe a la Federación Mexicana de Asociaciones de Atletismo y a la Asociación representante en Veracruz. Digamos, ha alejado el tema deportivo, y se ha encargado de politizar a la disciplina que según él tanto ama y respeta.

Israel Francisco, no dice que fue expulsado por su propia federación, el cual fue sujeto a un procedimiento, notificándole que no puede ser presidente de club, ni de asociación. No puede participar en ningún evento, ni organizar, ni convocar, esto como parte de una resolución de la Comisión de Honor y Justicia de la Federación Mexicana de Asociaciones de Atletismo en el 2014.

Hay que recordar un punto muy importante, que la vida interna de las asociaciones deportivas, en cuestión de su organización es autónoma, por lo que solamente sus agremiados pueden elevar o no a una persona como su representante.

El I.V.D. no restituye ni destituye a ningún presidente de asociación, según fuentes consultadas, el instituto tampoco contrata presidentes de asociación, lo que sí, es que los presidentes son reconocidos o no por sus federaciones, algo muy diferente y el señor no está reconocido ni por la representación nacional ni por la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo (IAAF).

Cuando fue funcionario del IVD en tiempos priistas, y después peleando la Asociación de Atletismo, su modus operandi desde antaño es dividir, y sacar el mejor de los provechos a su conveniencia.

Este fin de semana se llevó a cabo el Regional Nacional en el estado de Oaxaca, donde Veracruz obtuvo el primer lugar de las selecciones ahí presentes, y estamos hablando de Puebla, Oaxaca, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Sumando un total de 92 preseas, de las cuales 37 fueron de oro.

La selección veracruzana se conformó de 143 atletas, lamentablemente, algunos más se quedaron afuera, ya que por cuenta propia o presionados por el señor Benítez, decidieron no inscribirse en las clasificatorios estatales.

Cabe destacar que en su momento (13 de febrero de 2018), el Instituto Veracruzano del Deporte optó por ampliar los filtros para los atletas, reiterando su invitación a quienes por algún “motivo” no habían participado en los regionales de olimpiada estatal, y tuvieran una nueva oportunidad de asistir al clasificatorio, subsidiado por el Gobierno del Estado y avalado por la FMAA, nos aseguran.

“El deportista debe apegarse a los filtros, a las convocatorias, que no las marca un solo instituto, acuérdense que sigue las convocatorias madre que son las que emite CONADE, y en base a esas convocatorias, nosotros los institutos nos apegamos a esos parámetros, no se vale que digan el instituto no los lleva, nosotros a través del recurso de todos los ciudadanos, invertimos en hacer estos filtros para que todos participen, es una convocatoria abierta, que se saca en prensa, en las redes sociales institucionales, insisto, quienes no se presentaron a un filtro, de quienes no existe una memoria técnica de que hayan asistido a un filtro, no pueden participar, no es que el instituto digan si pueden o no pueden, es que no lo permite el sistema que abre Conade porque no hay una marca anterior, no hay un filtro obligatorio”, asegura María de los Ángeles Ortiz, rectora del deporte veracruzano.

En días pasados, antes de comenzar el certamen de atletismo, a un diario de la capital le refirió que ya había metido una solicitud para que sus seguidores pudieran asistir al regional de la especialidad, sin decir ante que órgano fue el trámite.