*/*…Que ganó Claudia Sheinbaum incluso con más votos que AMLO en el 2018: según el conteo que ayer culminó de la elección del 2 de junio, y ustedes lectores/ lectoras, decidirán si creen en este resultado oficial, o permanecen en la convicción que ahora algunos “analistas” llaman “conspirativa”…
*/*… Y acepten que los medios tradicionales catalogados como “nacionales” por estar en la capital del país, propalen dicho resultado y comiencen a pedirle a la gente inconforme “que ya, hay que darle vuelta a la página…”; que ya “no tiene caso” dicen, seguir mandando “fotos de las sábanas…” que prueban la alteración de cifras, y porque 16 mil actas confirmadas, y otras tantas miles y miles por todo México, más las que fueron robadas, incineradas o han aparecido en basureros, según consta en cientos de videos por redes, “no revierten los resultados…”
*/*…Es el triunfo de MORENA que, qué raro, como sucedió en la campaña, ninguno ha visto que celebren multitudes en calles y plazas; pero sí vemos videos de gentuza exigiendo, a plena luz y sin avergonzarse siquiera, el pago que les prometieron por vender su voto…
*/*…En tanto, Sheinbaum, en medio de la caída del “súper peso” y el aumento gradual del dólar, ignoró la petición de trabajadores del Poder Judicial que le mandaron una carta: ocupada como está en acatar la orden de AMLO para desintegrar al PJF tal como está, actualmente estructurado, y acelerar las 18 iniciativas del aún presidente, que terminarán por modificar toda la estructura del sistema político mexicano como tal. Eso no lo comprenden muchos. Pero lo resentirán gradualmente en los bolsillos: que es lo que importa porque pega, a todos por igual…
*/*…Semana terrible para millones: muchos no entienden que pasó con la elección del 2 de junio y la sensación de que han sido robados y burlados, permanece; no se habla de otra cosa y es inevitable escucharlo en mesas de cafés, en la sobremesa de la comida; en el transporte público donde incluso hay agresiones verbales de inconformes con conformes y las pequeñas historias, que conforman las grandes, van surgiendo…
*/*… “¿Y bueno qué pasó con la señora de los hielitos…?” La amiga arquea las cejas y dice: “ya no le compramos…” Las niñas que están en esa mágica transición de dejar de serlo para entrar a la plenitud feliz, rodeadas de amiguitas del colegio, asienten sudorosas y sonrientes, mientras siguen chapoteando en la nítida piscina turquesa y confirman: “si ya no le compramos…” ¿Y eso?, insistimos, porque el calor es terrible y estamos antojadas de hielitos de cacahuate y coco. La amiga ríe y se encoge de hombros: “nos vino a preguntar ¿qué pasa?, no van a querer hielitos. Y que le decimos que no. ¿Y eso?, nos preguntó, he notado que nadie me compra dígame señora ¿qué pasa? Y que le digo: pues quite esa lona de morena y los vecinos volverán a comprarle, a lo mejor. Casi llora. Dice que se la pusieron, pero ella votó por Xóchitl y por Pepe. Ah bueno…”
*/*…Es ese tábano del que hablábamos ayer: ese resquemor que quedó flotando en el ambiente; que te hace mal ver al vecino y al compañero de trabajo, con el que antes sólo discutías si perdía tu equipo de fútbol favorito. Lo más triste es consignar historias de división amistosa o familiar: la peste morena lo consiguió y hoy varias cabezas de familia andan peleando con los viejos de la casa: “quédese con su apoyo y que le alcance para todo lo que tenía con nosotros”; “ahora papá con su apoyo y su pensión reducida búsquese quien le cocine, le planche, le lave y le lleve y le traiga sus medicinas que no encuentra cuando va…” “pues abuelo usted decidió por más que le dije: ahora que vengan ellos a llevarlo al imss y se formen por usted, lo suban y lo bajen y le den las medicinas como en Dinamarca, igualito…” “tío, usted decidió y se lo pedimos, así que ya no podemos tenerlo aquí pero pues sus dos apoyos le van a alcanzar para vivir bien dice usted…” “tías, lo siento, ya no puedo tenerlas en la casa, no quiero que sigamos peleando delante de los niños y la mujer ya no quiere tenerlas a usted, si está peleada con la mamá por lo mismo, pues imaginen con ustedes…” Y así por el estilo. Historias que escuchas de amigos, conocidos, empleados, compañeros. La ponzoña recorriendo los ambientes antes alegres…
*/*…Esperamos sinceramente que la reconciliación venga pronto. Al menos en lo familiar y amistoso. Se duda que se consiga a nivel político y social: el país quedó dividido y los que no reconocen a los gobernantes surgidos de esta elección de Estado, ignorarán a los mismos, más si no dependen de ellos. Muchos están buscando irse del país. Los gobiernos vienen y van, pero éstos días son, ciertamente, de alta incertidumbre…
*/*…Y cómo no recordar la fecha: el 7 de junio era antes, por todo México, motivo de alegría y fiesta reporteril: casi como “las posadas”, había desayunos, comidas, cenas; encuentros con gobiernos de todos los niveles; reconocimientos, regalos, bailes y pretexto seguro para ver a colegas de todos los puntos del estado. En la capital del país no era distinto: todos alrededor del presidente en turno, y en los estados, del gobernador: hubiera o no “relación”, o fueran o no “cercanos”, la fecha era una tregua pactada entre el Poderoso y los Medios, y propicia para el juego político, la revelación, el dato: los muchachos de la nueva guardia preguntan cómo era antes, y entonces una cae en la cuenta que ha envejecido…
VIERNES QUERIDOS Y ESTIMADAS: PASEN UN FINDE AMOROSO Y PACÍFICO. NOS LEEMOS CON AYUDA DIVINA, EL PRÓXIMO LUNES…
