En la mayoría de las ocasiones el llevar a nuestro perro a una estética canina, es porque huele mal, tiene parásitos de piel o el pelo está hecho una madeja de nudos; y solo circunstancias así deben ser valoradas en la consulta clínica.

Y resulta difícil hacer entender a un dueño, que la peluquería no es la solución inmediata a su problema, pues puede acrecentarse el daño a la piel del perro, o gato.

Y si le sumamos que ya le hicieron caso al compadre, vecino, curandero, de ponerle cuanto se les ocurra y para no descartar nada, pues a ponerle de todo un poco de lo que nos han dicho. Ese pobre animal termina con la piel destrozada literalmente.

Suele suceder que al llevar el perro a la estética, el peluquero sea solo eso: “peluquero de perros”, y no lo digo de manera peyorativa ni con tintes de herir susceptibilidades: al contrario, conozco personas que solo a eso se dedican y hacen magia.

Pero escapa de su conocimiento la salud de la piel, y manto del pelo entre otras cosas. Y no sabe cómo darle otra alternativa al dueño de la mascota: O es el dueño necio, quien representa una barrera para el lógico entendimiento y beneficio del animal: su necedad de “rápalo”, lastimará más la piel dañada.

Dependiendo de la raza del perro, será la necesidad de pelar o no, pues hay algunas que según su pelaje no debe de ser cortado nunca: no es igual nuestro pelo al de los animales; por ejemplo nosotros nos pelamos y nuestro pelo crece más sano y fuerte; en algunas razas ocurre todo lo contrario: mientras más lo cortamos más feo le saldrá y se le pondrá.

La raíz se debilita, pierde calidad, textura y color, y como consecuencia de esto el pelo se cae más.

De aquí pueden resultar problemas de piel: dermatitis, caspa seborreica y el dueño se queja de esta caída de pelo, y la mala decisión es rapar.

No: debe de haber un tratamiento indicado por el Médico Veterinario para la piel del animal y el cepillado para eliminar el pelo muerto. Técnicamente llamado deslanado.

Los perros y gatos pelo corto, no necesitan ser pelados, mudan 2 veces al año y en invierno cambian a una capa más gruesa para no pasar frío y cambiando en verano por un pelo algo más ligero, que sorprendentemente los protege del calor y del sol.

Debajo de su pelaje, en verano claro, se forma una especie de cámara de aire que los mantiene frescos durante el calor, y si los pelamos: adiós al fresco que ellos crean.

El Samoyedo, Pastor Alemán, CHow chow, Pomerania, Spitz, Golden retriver y Pastor belga, son algunos ejemplos de razas que van a la peluquería a lo que sea necesario: no a raparse, van a una buena sesión de deslanado.

Si tu hijo (a) tuviese piojos ¿qué haces? ¿ lo rapas aunque le lastimes su cabecita aunque sangre su cuero cabelludo? ¡Claro que no! Primero le eliminas los parásitos de su piel, sanas su cabecita y después cortas el pelo.

¡Aplica el mismo principio con tu mascota!

Por una vida animal digna.

MVZ.Amilcar Meza Rodríguez.
Vicepresidente de FADYS.
Presidente de EL ARCA.