Los pacientes diabéticos e hipertensos dentro de la clínica No 61 en el IMSS son canalizados al área de nutrición para instruirlos en cómo llevar una alimentación balanceada, pero debido a la falta de nutriólogos en la clínica las citas se dan desfasadas, así lo informa para EL MERCURIO DE VERACRUZ la Jefa de trabajo social, Fedra Suárez Lara, egresada del ICEST.

Indicó que actualmente cuentan únicamente con dos nutriólogos, uno para el turno matutino y otro para el vespertino, pero es necesario que en cada turno por lo menos haya 3 especialistas en esta rama ya que son 42 consultorios que atiende en ambos turnos.

Dijo que el paciente diabético e hipertenso se debe aplicar a su dieta, tomar sus medicamento y realizar ejercicio físico mínimo tres veces a la semana y con esto llevará una mejor calidad de vida, además con la posibilidad de que el médico en un futuro cercano le pueda disminuir la dosis de sus medicamentos, pero esto no quiere decir que podrá dejar de tomarlo, porque esta es una enfermedad crónica degenerativa y el paciente deberá aprender a llevar su enfermedad de la mano día a día.

Explicó que el área de trabajo social en la clínica 61 del IMSS, coordinan en forma directa dos programas, el primero es “Pasos por la Salud” y “yo Puedo”, donde también participan los nutriólogos, el médico familiar y el servicio de prestaciones sociales a cargo de la psicóloga Zurizararady Uscanga , quien se encarga del manejo de las emociones y de una actividad física.

En el primero, “Pasos por tu salud”, el objetivo principal es vigilar el peso del paciente y lograr que bajen su masa corporal, para que ellos eviten a largo plazo una enfermedad crónica degenerativa como la diabetes o la hipertensión y sobretodo si ya cuentan con antecedentes de los padres, este esquema lo llevan a cabo cada mes.

Resaltó que “Pasos por la salud” promueve en el derechohabiente el consumo de agua simple y la reactivación física.
CÓMO SE INCORPORA AL PACIENTE EN ESTE PROGRAMA?

El médico canaliza al paciente al área de trabajo social y dependiendo del diagnóstico se le incorporará en el programa indicado, es importante que el enfermo sea canalizado con un nutriologo para que reciba la orientación necesaria para modificar los hábitos de alimentación y con los recursos económicos que el derechohabiente cuente sepa qué comer y cómo prepararlo.

“YO PUEDO”

La entrevistada señaló que existe otro programa llamado “Yo puedo”, este es para los pacientes con diabetes o hipertensión y su finalidad es empoderar al paciente para que sepa llevar su enfermedad de la mano y la tomen como parte de su vida, se realiza cada mes y con un grupo en el turno matutino y otro por la tarde, el procedimiento es idem al programa arriba mencionado, el médico lo detecta y lo deriva a trabajo social para formar los grupos de aproximadamente de 30 personas, para posteriormente darles tres sesiones; en la primera les informan del conocimiento del personal de salud ( un sociograma), en la segunda plática es el empoderamiento a través de dinámicas como “Yo Tengo”, la cual consiste en una actividad física y alimentación correcta, y por último les informan cómo fortalecer el autoestima del paciente. En este programa “Yo puedo”, les enseña a elaborar ensaladas, y alimentarse correctamente, es impartido por el nutriólogo.

La coordinadora de trabajo social en el IMSS, explicó que hay pacientes diabéticos que hacen uso de la insulina diariamente y se cuidan realizando actividades físicas, cuidando su alimentación, (tres comidas y sus dos colaciones), miden su glucosa diariamente y controlan sus emociones, esto les ha permitido llevar una mejor calidad de vida. Descartó que la insulina afecte al paciente diabético, es un mito que han generado y se le receta al paciente que lo amerita.

Para finalizar explicó que ellos valoran a los pacientes que son canalizados al Centro de Seguridad Social Boca del Río, donde participarán en diversos talleres para el cuidado de su salud.